¿Has hecho un Business Plan? Es probable que hayas incluido un estudio detallado de tu competencia. Cuántos son. Qué dimensión tienen. Cómo hacen las cosas. Cuánto tiempo llevan en el mercado.
Es una forma tradicional de estudiar la competencia. ¿Tiene sentido? Seguro. Es una manera de poner en contexto tu negocio. El contexto es importante. Pero el contexto es eso, contexto.
Hay competencia. Es un elemento más en el mercado. Hay otros muchos. Tienes que prestarle atención, pero no puedes obsesionarte.
Las compañías que tienen éxito están atentas a todo lo que pasa a su alrededor. No miran sólo a su competencia. Las que miran sólo a su competencia tienen problemas:
1.- No descubren nuevas oportunidades. Cuando miras demasiado a tu competencia, dejas de mirar hacia delante. Las oportunidades pasan por delante de ti. Si no las miras con atención es probable que no las reconozcas.
2.- Reducen su campo de actuación. El mundo de tu competencia se convierte en tu mundo. Los límites de tu competencia son los tuyos. Juegas el partido en el mismo campo que lo hace tu competencia.
3.- Sufren más competencia. Cuando todos estáis en el mismo sitio, todos peleáis por lo mismo. Es un mundo que, poco a poco, se va saturando y en el que la vida no es cómoda.
4.- Son cada vez más parecidas. Tu competencia se convierte en un modelo. Te mueves en función de sus movimientos. Piensas como piensan ellos. Decides ser igual. Dejas pasar la oportunidad de ser diferente.
La competencia te pone en contexto, pero también te condiciona. ¿Es importante? Es importante saber que existe. Es necesario no estar atado.
No pienses tanto en tu competencia y piensa más en tu negocio. Intenta definir tu futuro. No des a los demás la posibilidad de condicionar tu desarrollo. Por lo general, no funciona.
Salvador Figueros
Foto: ejharaldseid / Flickr
